viernes, 2 de marzo de 2018

¡Alma vive!



Cierras los ojos.
Juegas con las letras y haces un cuaderno.
Le llamas Alma.
Abres tus ojos y observas cada página.

Pones el cuaderno en la ventana de los sueños.
El viento sopla con intención y hace resbalar cada una de sus palabras.
Todas caen al suelo.
Gritas: ¡Pobre Alma!
Te dispones a recoger cada letra.



Con tu mano derecha tomas el cuaderno,
 que ahora está en blanco.
Cada letra se amontona sobre tu mano izquierda.

Derramas lágrimas mientras juegas nuevamente con las letras.
Haces una oración.
Ríes un poco.
Nace la segunda oración.
Se va creando Alma.
¡Alma vive!



Das lugar al baile,
a la risa y al amor.
Agarras con fuerza ese cuaderno.
Lo mimas.
Das las gracias.





Elizabeth Nun 






No hay comentarios.:

Publicar un comentario